Las fotos que muestro no hacen justicia al celuloide estriado de estas Waterman W5 fabricadas en Inglaterra en 1946. Por no decir iguales, son similares a las 515 fabricadas en América. A su vez, todas ellas son parecidas al modelo "Hundred Years", pero no por ello son peores plumas, ni más feas.
Visto el estado de conservación no se pueden considerar ninguna joya de coleccionista, pero, sabiendo que son para ser usadas, ni falta que hace. Así se pueden llevar a cualquier parte sin miedo a que se rayen. Tienen los dorados desgastados, cosa habitual en este modelo, y una de ellas tiene una aleta del alimentador rota. Síntoma de que han tenido una vida intensa.
Cargan tinta por palanca, tienen un cuerpo de celuloide estriado y alimentador de ebonita. Mide 129mm con el capuchón cerrado y sólo pesa 15g cada una.
Tienen un plumín del tamaño 5. Uno de ellos es rígido y el otro semi-flexible.
Las plumas, además de tener una estética que me gusta, tienen un flujo jugoso y continuo, que permite escribir sin parar. Parte de culpa lo tiene el diseño del alimentador que, aparte de el canal de alimentación, tiene dos carriles a lo largo de la parte baja. A través de ellos también circula la tinta, aportando un extra de fluido. Siendo esto así, es difícil que escriban mal.
Termino con una muestra de escritura de varias W5:
¿La próxima vez que veáis una de estas os resistiréis a dejarla pasar?
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