miércoles, 1 de mayo de 2019

Mi última Pelikan M1000 con culito de bebé

Compras con toda la ilusión una Pelikan M1000, que no es cualquier pluma, y al escribir te das cuenta que el iridio está sobrepulido y tiene "culito de bebé" ¿Os suena? Es la historia interminable. Bueno, será la penúltima pluma con ese defecto. Por que seguro que no será la última.



La estilográfica la gané en una subasta de ebay. Mi beneficio fue que la adquirí algo más barata que comprándola nueva, pero, a cambio, vino con esta desagradable sorpresa.













Si os fijáis en el iridio, habrá que desbastar mucho el punto para eliminar ese efecto redondeado que tienen las aristas. Como la cantidad de iridio que queda no es mucha, se ve que el margen de maniobra es limitado.
Dado que la tengo que mandar a retocar o, seguramente, a cambiar el iridio... ¿Y si se lo hago yo? No pierdo nada -pensé- No es la primera vez que me pongo a tallar iridios. Desde hace un tiempo lo hago con la ayuda de una Dremel y diferentes cabezas de lijado y pulido. Últimamente me atrevo con cualquier pluma, y me da igual que sean baratas o caras. Es algo
 temerario, pero el resultado final merece la pena.

Así quedó el plumín:











Este es el final feliz; Si no hubiera venido con el llamado "baby's bottom", no estaría disfrutando de este punto con mucho más personalidad que los B de fábrica. No me hubiera atrevido.

Si lo pienso bien, a pesar del disgusto inicial, he sido afortunado.
Ya solo falta unas fotos mejores para presentar la pluma como es debido.











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